29ª semana del Tiempo Ordinario, jueves

Años impares

Rm 6, 19-23: Convertíos en siervos de Dios. La esclavitud del pecado acaba en la muerte; pero la sumisión a la justicia de Dios produce la santidad y lleva a la vida eterna. Comenta San Agustín:

" "Despojaos del hombre viejo para revestiros del nuevo". El Señor establece un pacto con vosotros. Habéis vivido para el mundo, os habéis entregado a la carne y a la sangre, habéis llevado la imagen del hombre terreno... Llevad en adelante la de Aquel que procede del cielo: es Palabra humana, puesto que "la Palabra se hizo carne", y "como pusisteis vuestros cuerpos como armas de iniquidad al servicio del pecado, así ahora debéis exponerlos como armas de justicia al servicio de Dios" (Rm 6, 19). Para vuestra ruina, vuestro enemigo se arma con vuestros dardos; para vuestra salvación, ármese a su vez vuestro Protector con vuestros miembros " (Sermón 216, 2,).

– " Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor ", rezamos con el Salmo 1, dichoso el que no sigue el consejo de los impíos, ni entra por la senda de los pecadores, ni se sienta en la reunión de los cínicos, sino que su gozo es la Ley del Señor y medita su Ley día y noche. Será como un árbol plantado al borde de la acequia; da fruto en su sazón y no se marchitan sus hojas y cuanto emprende tiene buen fin. No así los impíos, no así, serán paja que arrebata el viento, porque el Señor protege el camino de los justos, pero el camino de los impíos acaba mal ".

Años pares

Ef 3, 14-21: Ora el Apóstol pidiendo que Cristo habite por la fe en nuestros corazones. Comenta San Agustín:

" Ya ves lo que dice el Apóstol: "Cristo habita por la fe en vuestros corazones" (Ef 3, 17). Según su presencia hermosa y divina, está siempre con el Padre; en cambio, según la presencia de la fe, está en todos los cristianos. Por eso fluctúas, porque Cristo está dormido, es decir, no logras vencer aquellos deseos que se levantan con el soplo de los que persuaden al mal, porque tu fe está dormida. ¿Qué significa que tu fe está dormida? Que está apagada. ¿Qué quiere decir que está apagada? Que te olvidaste de ella. ¿Qué es despertar en ti a Cristo? Despertar la fe, recordar lo que has creído. Haz memoria, pues, de tu fe, despierta a Cristo. Tu misma fe dará orden a las olas que te turban y a los vientos de quienes te persuaden el mal " (Sermón 361, 7).

– Cantemos con el Salmo 32 a la misericordia del Señor, que llena la tierra: " Aclamad, justos, al Señor que merece la alabanza de los buenos; dad gracias al Señor con la cítara, tocad en su honor el arpa de diez cuerdas. La palabra del Señor es sincera, todas sus acciones son leales. El Señor ama la justicia y el derecho. El plan del Señor subsiste por siempre; sus proyectos de edad en edad ". Él nos eligió como heredad suya desde antes de la creación. Alabemos al Señor, démosle gracias.

Evangelio

Lc 12, 49-55: Cristo vino a inflamar al mundo con el fuego de su amor. Cristo, enviado por el Padre, vino al mundo para incendiar a la humanidad en el fuego divino del Espíritu Santo. Comenta San Ambrosio:

" No es un fuego que destruya los bienes, sino ése que hace germinar la buena voluntad y enriquece los vasos de oro de la Casa del Señor... Ese fuego divino que agosta los deseos terrenos, suscitados por los placeres mundanos, los cuales deben perecer como obra de la carne... El fuego del Señor es una luz eterna y con ese fuego es con el que se encienden las lámparas de los que esperan la llegada del Señor... Es el fuego que ilumina los íntimo del corazón... Con ese fuego nos infunde la devoción, consuma en nosotros la perfección... Con su presencia arroja luz sobre los misterios " (Tratado sobre el Evangelio de San Lucas lib.VII,132-133).