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Oraciones de entrada
Renovación de la intención de consagrar (sacerdotes)
Desde la sacristía al altar (sacerdotes)
Incensación del altar (sacerdotes)
Al subir el sacerdote al altar
Ofertorio
Para el sacerdote
En la incensación del altar
En el lavabo
Terminado el lavabo
Acto de entrega de sí
Consagración
Que recitaba San Josemaría
Actos de fe, esperanza y caridad
Al darse la paz
Del incienso (tradición copta)
Antes de la Comunión
Antes de "Este es el Cordero de Dios" (sacerdotes)
Comunión espiritual
A la Virgen
A San José
Antes de Comulgar
Después de la Comunión
Después de comulgar
Mientras las purificaciones
Del "adiós al Altar"

Entrada

  Renovación de la intención de consagrar (sacerdotes)

Yo quiero, Señor, renovar "in persona Christi", el Divino Sacrificio del Calvario, de modo incruento, y consagrar el Cuerpo y la Sangre de mi Señor Jesucristo.

  Desde la sacristía al altar (sacerdotes)

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Me acercaré al altar de Dios. Al Dios que llena de alegría mi juventud.
Júzgame Tú, Dios mío, y no abandones mi causa a merced de la gente malvada: líbrame del hombre perverso y falaz.
Pues que Tú eres, oh Dios, mi fortaleza; ¿por qué me has desechado de Ti? ¿y por qué he de andar triste, cuando me aflige mi enemigo?
Envíame tu luz y tu verdad: ellas me han de guiar y conducir a tu santo monte, hasta llegar a tus tabernáculos.
Y me acercaré al altar de Dios; al Dios que llena de alegría mi juventud.
Cantaré tus alabanzas con la cítara, oh Dios, Dios mío; ¿por qué estás triste, alma mía, y por qué me llenas de turbación?
Espera en Dios, pues todavía he de cantarle alabanzas; por ser Él mi salvador y mi Dios.

Gloria al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Me acercaré al altar de Dios. Al Dios que llena de alegría mi juventud.

Nuestro auxilio está en el nombre del Señor. Que hizo el cielo y la tierra.

  Incensación del altar (sacerdotes)

En la imposición del incienso:

Bendígate Aquél en cuyo honor serás quemado. Amén.

  Al subir el sacerdote al altar

Te suplicamos, Señor, que borres nuestras iniquidades: para que merezcamos entrar con pureza de corazón en el santuario. Por Cristo nuestro Señor.

Te rogamos, Señor, que por los méritos de tus Santos, cuyas reliquias están aquí, y de todos los Santos te dignes perdonarme todos mis pecados. Así sea.

Ofertorio

  Para el sacerdote durante el Ofertorio

Ofrenda del pan:

Recibe, oh Padre Santo, todopoderoso Dios, esta inmaculada Hostia, que yo indigno sacerdote tuyo te ofrezco a Ti, mi Dios vivo y verdadero, por mis innumerables pecados, ofensas y negligencias, por todos los que están presentes, y también por todos los fieles cristianos, vivos y difuntos, para que a mí y a ellos nos aproveche para la salvación y para la vida eterna. Amén.

Al verter vino y agua en el Cáliz:

Oh Dios que creaste maravillosamente la dignidad de la naturaleza humana y más maravillosamente la reformaste, haznos por el misterio de este agua y de este vino, participar de la divinidad de tu Hijo, Señor nuestro Jesucristo, que se dignó participar de nuestra humanidad. El cual vive y reina contigo, en unidad del Espíritu Santo, Dios, por todos los siglos de los siglos. Amén.

Ofrenda del Cáliz:

Te ofrecemos, Señor, el Cáliz de salvación, suplicando a tu clemencia que en suave olor ascienda a la presencia de tu divina Majestad, por nuestra salvación y la de todo el mundo.

Después del "Con humildad y sinceramente":

Ven, Santificador todopoderoso, eterno Dios y bendice este Sacrificio, preparado a honra de tu santo Nombre.

  En la incensación del altar

En la imposición del incienso:

Por intercesión del bienaventurado San Miguel Arcángel, que asiste a la diestra del altar del incienso, y de todos sus escogidos, dígnate, Señor, bendecir este incienso y aceptarlo como un suavísimo perfume. Por Cristo nuestro Señor.

En la incensación de las ofrendas:

Este incienso que has bendecido suba hasta Ti, Señor, y descienda sobre nosotros tu misericordia.

En la incensación del altar:

Suba, Señor, a tu presencia, cual incienso mi oración; sea la elevación de mis manos como el sacrificio vespertino. Pon, Señor, guarda a mi boca y puerta fortificada a mis labios, para que mi corazón no se incline a palabras maliciosas, hasta buscar pretextos en el pecar.

Al entregar el incensario al diácono o al ayudante:

Encienda el Señor en nosotros el fuego de su amor, y la llama de su eterna caridad. Amén.

  En el lavabo (Sal 25, 6-12)

Lavaré mis manos entre los inocentes y estaré, Señor, alrededor de tu altar.
Para escuchar tu alabanza y publicar todas tus maravillas.
Señor, yo he amado el decoro de tu casa y el lugar de tu gloria.
No pierdas, Señor, mi alma con los impíos, ni mi vida con los hombres sanguinarios.
En cuyas manos no hay más que crimen y cuya diestra está llena de sobornos.
En cambio yo he amado la inocencia; sálvame y ten piedad de mí.
Mis pies han seguido el camino recto; y te bendeciré, Señor, en las asambleas.

Gloria al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

  Terminado el lavabo

Recibe, Santa Trinidad, esta oblación que te ofrecemos en memoria de la Pasión, Resurrección y Ascensión de nuestro Señor Jesucristo; y en honor de la Bienaventurada siempre Virgen María, de San Juan Bautista, de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, y de éstos y de todos los Santos, para que a ellos les sirva en honor y a nosotros como salvación, y ellos en los cielos se dignen interceder por nosotros que celebramos su memoria en la tierra. Por el mismo Jesucristo Señor nuestro. Amén.

Consagración

  De San Josemaría en la Consagración

En cada elevación y genuflexión:

Señor mío y Dios mío.

Adáuge nobis fidem, spem et charitátem.

Padre Santo, por el Corazón Inmaculado de María, os ofrezco a Jesús, vuestro Hijo muy amado, y me ofrezco a mí mismo en Él, por Él y con Él, a todas sus intenciones, y en nombre de todas las criaturas.

Señor, danos la pureza y el "gaudium cum pace", a mí y a todos.

Adóro te, devóte, latens déitas, quae sub his figúris vere latitas. Tibi se cor meum totum súbiicit, quia te contémplans totum déficit

¡Bienvenido al altar!

  Actos de fe, esperanza y caridad

¡Señor mío y Dios mío!

Te adoro con devoción, Dios escondido, oculto verdaderamente bajo estas apariencias.

¡Señor, creo, pero aumenta mi fe!

¡Espero, pero fortalece mi esperanza!

¡Te amo, pero enséñame a amar!

Al darse la paz

  Del incienso

Tradición copta

Oh Rey de la Paz, danos tu Paz
y perdona nuestros pecados.
Aleja a los enemigos de la Iglesia
y guárdala, para que no desfallezca.

Emmanuel, Dios con nosotros,
está entre nosotros
en la gloria del Padre
y del Espíritu Santo.

Bendícenos
y purifica nuestro corazón
y sana las enfermedades
del alma y del cuerpo.

Te adoramos, oh Cristo,
con el Padre de bondad
y con el Espíritu Santo,
porque has venido, nos has salvado.

Antes de la comunión

  Antes de Este es el Cordero de Dios (sacerdotes)

En la genuflexión anterior a Este es el Cordero de Dios:

Tomaré el Pan celestial e invocaré el nombre del Señor.

  Comunión espiritual

Yo quisiera, Señor, recibiros con aquella pureza, humildad y devoción con que os recibió vuestra santísima Madre; con el espíritu y fervor de los santos.

  A la Virgen antes de Comulgar

He aquí, Madre amantísima, que voy a recibir el Cuerpo y la Sangre de tu divino Hijo Jesús, formados por obra del Espíritu Santo en tus purísimas entrañas.
Dígnate avivar en mi espíritu aquella fe en Jesús que tú tuviste; enciende en mi corazón aquel amor con que le amaste y adoraste en tu seno virginal.
Por pobre de merecimientos que esté mi alma y por mezquino que sea mi corazón, si tú lo preparas, Jesús se sentirá bien y se complacerá en él.
Por el honor de tu divino Hijo, gloria tuya y bien de mi alma prepara en mí un digno recibimiento y una digna morada para Jesús Sacramentado. Amén.

  A San José antes de comulgar

Oh José, que te entregaste al servicio de Jesús y de María, y les fuiste fiel hasta la muerte, haz que yo sea generoso en su servicio, enséñame a tratar con cariño a Jesús y a recibirle en la Comunión con un corazón puro. Amén.

  Actos de fe, esperanza y amor antes de comulgar

¡Señor mío Jesucristo!, creo firmemente que voy a recibir tu Cuerpo, tu Sangre, tu Alma y tu Divinidad.

Espero, Señor, que ya que te das todo a mí, en la Eucaristía, tendrás misericordia de mí y me otorgarás las gracias necesarias para mi salvación eterna.

Dios mío, te amo con todo mi corazón, con toda mi alma, con todas mis fuerzas y sobre todas las cosas.

¡Señor!, te adoro y te reconozco como mi Creador, Redentor y soberano Dueño.

Después de la comunión

  Después de comulgar

¿Qué retornaré al Señor por todos los bienes que me ha otorgado? Tomaré el Cáliz de salvación e invocaré el nombre del Señor. Con alabanzas invocaré al Señor, y seré libre de mis enemigos.

  Mientras las purificaciones

Tu Cuerpo que he recibido y tu Sangre que he bebido, adhiéranse a mis entrañas, Señor; y haz que no quede mancha de pecado en mí, alimentado con tan puros y santos Sacramentos. A Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

  Del “adiós al Altar”, antes de salir del templo, después de la liturgia

Tradición siro-maronita

Queda en paz, oh Altar de Dios. La oblación que hoy he ofrecido sobre ti, sea para la remisión de las culpas y el perdón de los pecados y me alcance estar ante el tribunal de Cristo sin condena y sin confusión.
No sé si se me concederá volver a ofrecer sobre ti otro Sacrificio.
Protégeme, Señor, y conserva a tu Santa Iglesia, que es camino de verdad y de salvación. Amén.